Fumar es malo, pero el Decanato de Derecho es peor

Concierto de la Coral Universitaria en el patio de La Merced antes de la paella, 23-02-2023 (fuente: propia)

Aunque fue un parche, ya quisieran muchos hacer un parche así. Por tercer año consecutivo, la Facultad de Derecho se quedó sin poder celebrar sus tradicionales Sangrías, los dos primeros por motivos sanitarios y el último por culpa del Decanato.

Con dos días de antelación, se promulgó una paella -literalmente una paella; no paella más fiesta, una paella- adornada por un pregón -bastante pelotero y redundante, menos original no podía ser- y un concierto de la Coralita Universitaria. Ése sí que fue bueno. Es verdad que mis prejuicios, como los de cualquiera, me confundieron un poco la vista -yo con Coral imaginaba chicos y chicas vestidos de traje, pajarita, cuello duro, etcétera- y cuando los vi entrar pensé: "Vaya panda de perroflautas de pelo tintado". Pero, una vez más, me dieron en la boca. La música y las interpretaciones estuvieron fabulosas -especialmente la interpretación de Bagdad, de Rosalía-. Se creó ese ambiente que percibes cuando disfrutas de verdad. La acústica ayudó bastante. Hasta tenían entre sus filas a un tiktokero pofresional, el roneante @daviidalarconn. Gente genuina, güena gente.

Siendo las condiciones que eran, yo le pondría a todo un notable bajo. El arroz con costillejas estaba bastante rico -y con hambre, más-. No más rico que el de mi abuela, pero igualmente muy bueno.

Y ahora vamos con las mentiras. La señora decana, doña Francisca Mª Ferrando García -lo pongo así de pomposo para que parezca más- quiso tomar la palabra para desmentir las noticias de algunos medios regionales acerca de la ampliación de los grupos (en cristiano, que van a meter a más peña en las clases). La decana dijo que no, que eso era mentira y que ni se van a ampliar ni disminuir, que sencillamente se van a mantener los mismos niveles que los del presente curso. ¿Cómo se puede tener la desfachatez de engañar de esa manera a todos los que formamos parte de la UMU? Por lo menos si es verdad, no diga nada; pero que encima tenga la poca vergüenza de salir a decir eso me parece acojonante. Tápese un poco. Y luego se nos llena la boca hablando de investigación y prestigio, cuando no cuentan siquiera con los estudiantes -o los representantes de los estudiantes-, que son el verdadero pilar de las facultades. En fin: fumar es malo, pero el Decanato de Derecho es peor.

Alfonso G. Mengual